Diseñado por el arquitecto holandés Alan Rijks, La Estancia Golf recuerda trazados más antiguos, como el del St. Andrews, con nueve hoyos de ida y nueve de vuelta. Incluso dos hoyos comparten green (el 4 y el 14), aunque en el gaditano un gran bunker entre ellos ayuda a una mejor definición. El campo es bastante llano y cómodo de caminar si bien se han efectuado algunos movimientos de tierra que lo han moldeado para aportarle sinuosidad. También se encuentra gran variedad ornitológica y floral. Los olivos centenarios recién plantados, las encinas y los pinos que adornan el paisaje serán, sin lugar a dudas, un factor más exigente cuando alcancen mayor tamaño. Mientras, permiten disfrutar de calles anchas y un recorrido amable que admite ocasiones de birdie. La ausencia de construcciones alrededor del campo, poco habitual ahora, proporciona una doble emoción del juego en sí y de la naturaleza. Desde cualquiera de las tres salidas de un tee prácticamente sólo se divisa ese hoyo, por lo que la concentración en el juego encuentra las mejores condiciones. Dos lagos y dos arroyos son las dificultades que plantea el agua en el recorrido si bien no afectan en exceso al juego. No obstante, será el viento y la brisa marina los principales factores a tener en cuenta en La Estancia Golf, ya que está situado a sólo 2,75 Km. del mar y a una altitud entre 14 y 28 metros. La correcta elección de los palos en los greenes grandes (750m2 de media) y con caídas obligan a prestar una atención especial al putter. Las instalaciones deportivas se complementan con un campo de prácticas de 120m. de ancho por 280m. de largo además de un putting green y de una gran superficie de chipping. La casa-club, de estilo andaluz, es el centro de recepción del servicio gratuito de transporte para los jugadores entre el campo de golf y el hotel Meliá Sancti Petri, único con categoría 5 estrellas Gran Lujo de la Costa del Sol, y que completa la oferta de ocio y relax. Nota: Existe transfer gratuito a los hoteles del Novo Sancti Petri